Archivos Mensuales: abril 2011
Nos urge un clásico
Por L.C. Daniel Fajardo
Los últimos 15 días han sido bastante emocionantes con los partidos que hemos vivido con dos grandes del balompié mundial, Barcelona y Real Madrid y aunque los dos primeros juegos de los cuatro que el destino los citó para jugar no han sido lo más espectacular en fútbol, todos los fanáticos del buen juego sabemos que lo mejor está por venir.
Un partido que no sólo le ha dado la vuelta al mundo por ser dos de los equipos más populares de todo el planea sino también por ser el clásico español el que acapara la atención en estos momentos, y ya que estamos hablando de clásicos también durante estos 15 días, vivimos nuestro partido más representativo entre un mediático Club América vs. un polémico Chivas de Guadalajara.
Falto al respeto a estas instituciones de esta manera porque creo que en lo futbolístico no hay mucho que decir y no hablo de la cadena de fracasos que han vivido en este torneo sino a una crisis tan profunda que podemos remontarnos a los 90 s donde el clásico se volvió 100% mediático, recuerdo los duelos en los 80s (y para los que no los hayan vivido sólo falta ver cualquier especial en Televisa donde hablen de ese heroico América que llenaba estadios y que sudaba la camiseta), donde era una auténtica guerra en la cancha, donde los jugadores se entregaban durante todo el partido para brindarle un espectáculo a la afición y mantener la supremacía frente a su más odiado rival.
Pero en algún momento, no sabemos ¿por qué?, parece que la rivalidad se volvió más un eslogan, al grado de vender camisetas afuera del estadio que decían “Yo estuve en el clásico” y recuerdo ese aburridísimo partido de 0-0 o bien el intercambio de jugadores donde sin importar lo que la afición pudiera expresar, jugadores de América y Chivas pasaban de un equipo a otro convirtiendo las rivalidades sólo en palabras pero en lo futbolístico, desde hace tiempo que la historia ya no se cuenta de esa manera.
Pero esta situación va más lejos que un simple clásico sino con la imagen de nuestros equipos más representativos que viven en una crisis total, equipos pequeños con muchos méritos futbolísticos ocupan los primeros planos de nuestro país un Toluca, Monterrey, Pachuca, por mencionar algunos, empiezan a superar a los grandes en el plano deportivo y en la cosecha de resultados a pesar de no contar con las convocatorias en afición que los principales equipos mantienen a nivel nacional cuyo nivel no les ha permitido participar en competencias internacionales debido a que son los equipos de mejor desempeño los que asisten. Veámoslo así, si Chivas, América y Cruz Azul que son los equipos que a nivel internacional tienen más reconocimiento en el medio futbolístico no se dan cita para aparecer en competencias internacionales y esos lugares son ocupados por un San Luis o Jaguares, ¿quién es el grande en la liga?, ¿quién es el gallo en México?, por supuesto que esos lugares deberían ser ocupados por los “grandes”, “los históricos” y esos sitios simplemente ya no son para los grandes, que cuando han llegado, realizan actuaciones mediocres mostrando el verdadero nivel del club que insisto desde hace tiempo es más de palabra que de resultados.
Hoy el éxito del clásico en nuestro país es conformista, con que haya goles nos damos por bien servidos porque la verdadera rivalidad se vive ahora en el plano de la polémica y no en la cancha, hace más ruido una declaración de Vergara que los resultados que el equipo pueda tener o el momento que pueda vivir.
Nos urge un clásico, nos urge ver a América y a Chivas ser equipos grandes, triunfadores, históricos, nos urge tener una representación sería a nivel clubes en el plano internacional, no puede ser que ahora un clásico sea con promoción en las entradas y que ni así se llene, ver a uno de los “mejores” equipos del país, América o Chivas, con una taquilla tan pobre como si fuera un equipo de provincia, ¿dónde están los grandes de nuestro fútbol?, ¡no podemos llamar a esto los pilares de nuestro balompié!, salir a la cancha es más que cobrar una nómina o cumplir un sueño, es sudar la camiseta por brindar un buen espectáculo. Real Madrid, Barcelona y muchos equipos que figuran con constancia y resultados en el plano internacional nos pueden dar la lección, queda en los directivos, jugadores y afición si queremos aprenderla.
Necesitamos un gobierno de prevención ¡no de acción!
Por L.C. Daniel Fajardo
Esta semana fueron entregados los apoyos que el gobierno del Estado de México concedió a las familias afectadas por el nuevo desbordamiento del río La Compañía debido a una fisura en el canal y que consistió en una tarjeta de 20, 000 para la compra de electrodomésticos básicos.
Tras lo ocurrido el año pasado y al ver la situación de este y ver que la situación quedó bajo control 30 horas después, una de mis primeras ideas fue pensar ¿qué ocurriría si sucedieran varias fisuras al mismo tiempo?, ¿el gobierno tendría capacidad para repararlas? O bien un poco más extremista aun, ¿si de plano se rompiera el canal?
Pocos medios periodísticos le dieron espacio a estudiar las causas de las fisuras y se fueron más a grabar testimonios y seguir al gobernador, la prensa especializada hablo sobre fallas en las labores de mantenimiento, falta de prevención en las medidas de seguridad y monitoreo, en fin, ¡prevención!
Si revisamos muchos de los programas que el gobierno realiza podríamos encontrar un porcentaje muy alto en planes que se enfocan en solucionar problemas, tal como ocurrió ahora con estas familias quienes por segunda vez, en no más de un año de diferencia, reciben un “apoyo” del gobierno que en realidad no soluciona el problema con el riesgo latente de una nueva inundación en el futuro. ¿Por qué pensar sólo en medidas temporales, de rápida acción en algunos casos y no en las verdaderas causas del problema?, pareciera que el gobierno siempre va un paso atrás de la situación.
¿Cómo vemos a México en algunos años?, ¿qué problemas estarán vigentes para esos tiempos y qué podemos hacer ahora para prevenir y solucionar?
La situación de la obesidad, nunca pensé que México ocuparía la primera posición por encima de Estados Unidos, ¿no se pudo prevenir esto antes?, inmediatamente, y sólo cuando se señaló de manera internacional, México lanza diversos programas de acondicionamiento físico en las escuelas y algunas campañas tibias tirándole a frías en medios de comunicación para prevenir esta situación, ¡cuando el problema ya es una realidad!
Lo curioso es que si revisamos los problemas que ocurren en nuestro país, en todos los aspectos (seguridad, economía, educación por citar algunos) todos vienen de una mala planeación o una falta de atención de parte de las autoridades (sin quitar la responsabilidad de los ciudadanos por involucrarse en los procesos), y nuestro gobierno ocupa presupuestos y logística en estar parchando problemas en lugar de estar previniendo situaciones. No les quito el mérito por realizar acciones de respuesta, pero como bien dice el dicho “Una vez el niño ahogado a tapar el pozo”, Necesitamos un gobierno más de prevención y no sólo de acción.
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¡Laaargo Chacales!
Por L.C. Daniel Fajardo
Para muchos esta expresión por fin puso en su lugar a muchos medios de comunicación que escudados en una labor “periodística” se ven con el derecho de irrumpir aun cuando un artista está disfrutando un evento privado y que le corresponde a su vida personal.
O bien decir ¡ya basta! Al acoso de muchos medios que de igual manera en esa “labor periodística” no les interesa destruir vidas, dañar a terceros con tal de conseguir la nota, y como bien dijo el actor Odiseo Bichir, comportarse como auténticos ¡Chacales!
¿Acaso los periodistas deben ser intocables?, ¿no pueden cometer errores?, al otro día tras este evento la prensa de espectáculos indignadísima por la situación, argumentando un maltrato por el cumplimiento de su “deber”, en el programa “Ellas con las Estrellas” justificando a los periodistas que “pobresitos” si no llegan con la nota les pueden regañar, ¡por favor!, de entrada ese día Belinda no era la nota, la nota es la obra de teatro los actores, etc.
La productora comentó en una entrevista que sentía que la culpa era de la cantante, porque le pidió que atendiera a la prensa 5 minutos y la interprete de “Boba niña Nice” simplemente dijo que no, y por supuesto que la defiendo, ¡porque no por estar una cámara frente a ti tienes la obligación de contestarle y más si el evento no es tuyo!
Vámonos al punto de labor periodística, la urgencia de entrevistar a Belinda ¿para qué?, para saber por milésima vez si anda con Giovanni o es buscar la fórmula de ver correr a la cantante para simplemente “sacar la nota”, eso es un ejercicio fácil del periodismo, ya no hay investigación, ya no hay noticia, simplemente la nota es salir a provocar a un artista para verlo correr, ¿se necesita estudiar periodismo para lograrlo?, cualquier porro de universidad podría ostentar un título de periodista si la labor solamente consiste en esto.
El morbo es una fórmula que vende muy bien en México, veo muchas de las revistas en Sanborns que nos llegan de Estados Unidos, y en ninguna he podido encontrar lo que hay en México, mientras las del vecino del norte hablan sobre tips, información del artista (conoce mas a…, lo que hace fulanito en verano…), en México son ¡SE DIVORCIA!, ¡LO CACHAMOS PONIENDO EL CUERNO!, ¡LO DEJÓ SU ESPOSA POR INFIEL!, ¡SE OPERÓ LA NARIZ!, ¡AHORA LE DA POR LA BEBIDA!, si la bandera dice ser periodismo de espectáculos, ¿qué nos deja de utilidad como sociedad este tipo de información?
¿Queremos hablar de periodismo?, una buen reportaje sobre el detrás de cámaras de un programa, las cosas que no sabías de tu artista, fulanito te recomienda una rutina, lo que hace tal cantante para relajarse (un día con él), ¿no creen que sería igual de atractivo siempre y cuando se le echara “coco” a la nota?
Y sí, algo tan banal como la prensa de espectáculos también puede cumplir una labor social, ¿no creen que los mexicanos necesitamos escuchar de vez en cuando buenas noticias para al menos sentirnos bien?, te invito a checar noticieros de otros países y las tragedias, la corrupción, las infidelidades no son lo único que se publica, no son sólo “la noticia amable del día” como lo hace Lolita Ayala en su noticiero (una de cal por 30 de arena), en verdad a través de los medios existe un gran poder y uno de ellos es darle un poco de esperanza a la sociedad.
Si en Iniciativa México se realizó un pacto de “autocensura” sobre la violencia en México, ¿crees la prensa de espectáculos debería hacer lo mismo?
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Historias de héroes o villanos
Por L.C. Daniel Fajardo
La última participación de la selección mexicana despertó un gran número de críticas debido al resultado que se obtuvo frente a una selección relativamente “menor” a la nuestra, Venezuela.
Independientemente del resultado el partido llevaba su alta dosis de morbo, muchas de ellas centradas en el guardameta nacional, Memo Ochoa, quien nuevamente tras una salida mediática (en medio de declaraciones y polémica) del equipo tricolor su regreso sería con mas pena que gloria.
Durante el partido las críticas llovían por las redes sociales y al momento del gol un climax de declaraciones se vio culminado hasta varias horas después del partido, todas cuestionando la participación del guardameta como el representante bajo los tres palos del equipo tricolor.
Sin duda creo que fue el final para Memo Ochoa que más allá de lo deportivo ha sido condenado mediáticamente y como él podemos encontrar diversos casos de jugadores que un día han sido héroes y otras villanos.
Javier Aguirre, Ricardo Lavolpe, Kikín Fonseca, Bofo Bautista, los más recientes crucificados en el valle de la opinión pública donde el jugador número 12 muchas veces tiene poca memoria y que un día saca en hombros a un jugador por un gol ocasional y castiga por el más mínimo error humano que afecte el espectáculo.
Lo curioso es lo voluble que es la afición en México, ¡gracias a Dios Chicharito no juega en México y los grandes se hacen fuera! Porque los grandes jugadores que han hecho historia lo han logrado en la cancha y fuera de ella, con sus actitudes, humildad y visión del juego. En México inflamos a jugadores que son divos y tienen un nivel muy bajo, apoyados por los medios de comunicación acabamos con muchas carreras llenándolas de soberbia y presión social, todos ellos con el mismo destino, el fracaso.
Era curioso ver a muchos pseudomexicanos esperando con ansia el momento en que Memo Ochoa fallara, que Ricardo Lavolpe fuera eliminado, que x jugador fallara el penal, para celebrarlo como si hubiéramos ganado el mundial y con una sonrisa en el rostro decir ¡se los dije!, ¡jugamos como nunca y perdimos como siempre!, ¿Con quién estamos entonces?
La fama en este deporte puede estar distorsionada con tantos escándalos cada vez más importantes que la trayectoria deportiva, que si Carlos Vela sale con muchas artistas, que si Belinda es novia de Giovanni o que si el “Cuau” declaró sobre tal cosa.
La selección no ha sido la excepción, que si el “Chepo-tour” era lo indicado, ¿por qué mandar jóvenes a la Copa América? O ¿por qué convocar a un jugador?
La afición también ha sido infectada, viviendo con una falsa pasión la entrega a un equipo, poniendo en peligro a muchas familias que asisten a los estadios, realizar destrucción de propiedad ajena y más.
Las historias de héroes o villanos en el fútbol las escribimos los 12 jugadores que participamos en este juego, y todos somos protagonistas, jugadores, directivos y afición son representados durante 90 minutos en un campo de fútbol, cuando perdemos, perdemos todos y muchas veces la derrota se obtiene antes de entrar a la cancha, cuando las declaraciones de miles de mexicanos no están con el equipo nacional, cuando las actitudes son pesimistas y las burlas sustituyen a las porras en las gradas o tras los televisores.
¡Jugadores a la cancha a dar resultados!, ¡afición apoyar con corazón al equipo!, ¡medios a narrar y analizar los encuentros! Y ¡porras háganse sentir en los partidos!, ¡todos somos un equipo y como tal podemos ser héroes o villanos!
Con el mejor equipo y hacia una meta clara, el desarrollo
Por L.C. Daniel Fajardo
La semana pasada hablábamos de la poca memoria que tienen los políticos para esto de las alianzas, donde por una parte el discurso apunta hacia un lado y la práctica para otro.
Pero creo el problema de memoria es un mal que ataca diferentes ámbitos del medio político y uno de ellos, quizás el más grave se da en la sucesión del poder o también llamado cambio de administración.
Alguna vez mi maestra de Inglés de la Universidad me comentó que en México deberíamos ser doctores en Inglés, para los años que lo estudiamos (desde el kinder hasta la prepa por lo menos) son poco más de 10 años lo que dedicamos al estudio de la lengua y ¿cuál es el resultado?, la mayoría no pasa del I am, ¿razón? ¡Falta de continuidad! Si hubiera un verdadero plan cada año sería un avance y dominio del tema pero sucede todo lo contrario, cada año es empezar de 0 y lo mismo ocurre en la política con los cambios de administración cuando el inicio de un nuevo periodo significa empezar desde 0.
Desde funcionarios irresponsables que vacían los fondos para que la siguiente administración inicie con “sus propios recursos”, hasta los despidos injustificados de mucha gente que sin importar el partido dedican sus esfuerzos a realizar bien su trabajo.
Recién miraba en la televisión el caso del cambio de administración en el Ayuntamiento de Puebla y los panistas sacando las cosas de los pristas para ocupar las instalaciones enviando a estos, a cuartos como Infonavit y que trabajen 3 o 4 en una misma área (situación que por supuesto propició el PRI al llevar las riendas del Ayuntamiento teniendo a los panistas en las mismas condiciones), pues de ¿qué se trata esto?, ¿un ajuste de cuentas?
Comentaba también con un amigo la manera como en otros países se maneja la política, cuando hay un cambio de administración, independientemente de quien gane, las personas se mantienen en sus puestos y el encargado de prensa, por ejemplo, maneja medios de comunicación para el partido en turno. ¡Porque ese es su trabajo!
Los beneficios es que las personas pueden hacer carrera en su profesión y no andan saltando de barco en barco para mantener sus puestos, les permite querer a su país y amar a su profesión y no sólo estar pensando con quien me junto para poder seguirle.
En el caso de los programas hay más continuidad porque la siguiente administración da seguimiento a los proyectos ya que todos son planeados a largo plazo, en México es al revés los proyectos se planean a 3 años (en caso de Ayuntamientos) y cuando termina el periodo simplemente dicen: ¡Disculpe Usted no nos dio tiempo hay la próxima administración se hace responsable! y ¿qué ocurre? Pues simplemente el siguiente gobierno utiliza este proyecto como bandera política para criticar el pésimo trabajo de su antecesor y hasta le saca desvío de fondos. Lo triste es que llevamos décadas así medio cerrando ciclos y haciendo como en la clase de Inglés, empezando de 0 cada 3 o 6 años.
Muchos programas desaparecen afectando por ejemplo a los espacios culturales y grupos marginados que solamente son tomados en cuenta como bandera política pero que en la práctica jamás han visto un apoyo constante que permita un desarrollo.
Avance, progreso, bienestar, son algunos de los slogans más utilizados pero solamente se harán realidad cuando la meta sea clara y lleve como sinónimo la idea de desarrollo el cual, será producto simplemente da la continuidad, de la planeación a mediano y largo plazo utilizando como medio al mejor equipo, sin importar de que partido sean porque la selección NO TIENE COMO NOMBRE PAN, PRI, o PRD, se LLAMA MÉXICO, y sólo cuando aprendamos a valorar este realmente podremos dar pasitos seguros hacia un país más competitivo y en vías de desarrollo.
La comunicación debe ser acción
Parte I: Las causas sociales
Por L.C. Daniel Fajardo
La importancia del servicio social en todas las actividades que se ejercen como profesión en un país, son fundamentales para el desarrollo de la sociedad y la comunicación no está exenta de esta responsabilidad.
Uno de los primeros cuestionamientos que podríamos realizar como comunicólogos sería reflexionar acerca del aporte que nuestra actividad puede dar para impulsar este avance.
La investigación podría ser una rama importante en este aspecto pero como lo hemos mencionado en otros post, nuestra actividad vive una crisis en ese rubro por lo que se puede autodescartar este ámbito.
Tendríamos que pensar en los medios que nos permitan dejar un legado a los demás y creo, como analista de sistemas de información y comunicación, nuevamente nuestra actividad podría ser de gran ayuda para instancias que busquen promover un verdadero cambio y vean a la comunicación como una buena aliada para ello, me refiero a las diversas organizaciones que atienden algún tipo de causa social.
Las ONG en todo el país necesitan urgentemente la participación de comunicólogos para el diseño de estrategias creativas que permitan a la sociedad sensibilizarse con respecto a las problemáticas que atacan.
El diseño de sistemas de información, campañas más empáticas que a través del sentimiento o la razón puedan ayudar a estas organizaciones a cumplir con sus objetivos, el diseño de una imagen que permita identificarlas y hacerlas atractivas son algunos de los puntos que además de ser una gran necesidad para estas organizaciones, pueden ser un gran aporte de nuestro gremio para el desarrollo social.
Aunque hay que reconocer que la tarea es complicada, debido a que las audiencias muestran una gran resistencia para mensajes de esta naturaleza por lo que considero que no cualquier comunicólogo podría asumir este reto.
El resultado del mensaje va más allá de un simple entendimiento, el éxito sólo puede entenderse con acción, la resultante será ver a muchas personas involucrándose en los proyectos como parte de la solución, lo cual hasta ahora casi no ha sucedido.
El mensaje por su parte deberá tener en el resultado un grado de complejidad por los efectos que deberá causar en la audiencia los cuales son clave para el éxito del proceso, por lo menos podríamos considerar los siguientes como introducción al estudio de la comunicación para causas sociales:
– Participación social: Es importantísimo que las personas al ver un mensaje de esta naturaleza, no sólo se informen, el proceso debe ser 100% comunicativo y debemos buscar en nuestras campañas sumar voluntarios que aporten recursos (humanos, financieros, materiales) para la solución del problema
– Empatía: Cuando hablamos de aspectos sociales, debemos entender que el problema que buscamos difundir es un problema de todos, la comunicación tiene ese gran requisito, el diseño del mensaje debe ser tan empático que no es la asociación la que difundimos, sino la problemática que es presentada de tal forma que la gente deberá estar conciente del problema.
-Cultura del Cambio: La comunicación más que nunca debe ser acción, un mensaje inútil será el que solamente informe, el que no lleve consigo una respuesta que poco a poco se refleje en un cambio social (nos involucremos para ser parte de la solución) será inútil, la comunicación deberá ser generadora de un despertar, un reto donde las audiencias se vuelvan más críticas, se cuestionen y decidan intervenir, las ganas de cambiar las cosas serán un requisito fundamental para el éxito.
¿Un opción laboral?, ¿por qué no?
En México tenemos poca cultura con respecto a lo social y que esto puede ser un gran negocio. Muchos emprendedores han realizado grandes negocios impulsando varias causas sociales.
Como aquellos empresarios que vieron a un grupo de mujeres que en Oaxaca diseñaban bolsas regionales y decidieron apoyarlas y hoy, la marca es una de las más reconocidas en Europa como artesanía y última moda.
Además de que dichas mujeres mejoraron su situación económica y terminaron convirtiendo esta sencilla actividad en una empresa que genera empleos, este proyecto realizado por estudiantes de administración, que a partir de su carrera vieron en lo social un negocio, convirtieron esta actividad en una alternativa de desarrollo y demostraron que lo social puede ser un gran negocio.
¿Los comunicólogos que podríamos aportar para generar una gran industria?, ¿Qué organizaciones sociales serían un gran negocio para nosotros?, ¿quiénes necesitan nuestros servicios?, el ecoturismo quizás podrías ser una alternativa y como agentes de publicidad traer turistas para conocer ciertos puntos de nuestro país y apoyar a las comunidades para ello, campañas de difusión para diversas causas sociales como niños con cáncer, sida, etc. Porque Teletón ya nos puso un ejemplo de que lo social es un buen negocio, ¿por qué no seguirle los pasos con la misma fórmula?
Y así podríamos encontrar muchas áreas de oportunidad que, además de propiciar el autoempleo, podrían ser auténticas minas de oro aun sin explotar y ser una buena alternativa para muchos comunicólogos cuyas posibilidades laborales se reducen por la saturación de egresados y las pocas plazas que se ofertan en el país.
Estar frente a un medio de comunicación es una responsabilidad no sólo contigo sino con la sociedad para buscar el desarrollo de la misma, esta responsabilidad tiene muchas dimensiones, las causas sociales pueden ser un medio muy importante para aportarle a la sociedad sin perder de vista lo complejo que es diseñar un mensaje más allá de lo comercial, que promueva la participación social.
Es un medio que tenemos hoy los comunicólogos para buscar trascender en una sociedad que tiene una necesidad en la cual efectivamente podemos aportar algo y distinguir nuestra actividad de otros, dejarle algo a la sociedad para su desarrollo.
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